El certamen de la Liga Fiambalense de Fútbol atraviesa un nuevo conflicto que afecta la continuidad del torneo. La sexta fecha, que debía disputarse este fin de semana, quedó suspendida debido a una medida de fuerza tomada por la Cooperativa de Árbitros de Fiambalá (CAF), en solidaridad con el colegiado Yonathan Mamaní, quien denunció haber recibido amenazas de manera virtual.
La decisión fue comunicada oficialmente mediante una nota elevada a la Liga, en la que los árbitros manifestaron que no dirigirán encuentros hasta que se tomen las medidas correspondientes. La presentación incluyó pruebas —audios, chats y copia de la denuncia policial realizada por Mamaní— como respaldo del reclamo.
En el escrito, la CAF señaló:
“Nuestra cooperativa ha decidido por mayoría no arbitrar los partidos de Primera División que corresponden a la sexta fecha del torneo que hace disputar la Liga. La decisión es por solidaridad a nuestro colega Jonathan Mamaní, que fue objeto de amenazas telefónicas realizadas en su contra. Pedimos una reunión con el Consejo para unir criterios y poder seguir con el campeonato”.
Desde la organización advirtieron que la violencia verbal y las agresiones en el ámbito privado hacia árbitros y futbolistas se vienen repitiendo en el desarrollo del torneo, por lo que solicitan acciones concretas para garantizar el normal desarrollo de la competencia.
De esta manera, el fútbol fiambalense queda paralizado a la espera de una resolución que brinde seguridad y condiciones adecuadas para continuar con el campeonato.