En las últimas horas se multiplicaron los reclamos de vecinos de Fray Mamerto Esquiú, parte de Valle Viejo y de la zona norte de la Capital por la marcada turbiedad del agua que llega a los domicilios. La situación se registra desde hace unos días, aunque usuarios sostienen que los problemas comenzaron inmediatamente después de las últimas lluvias, que provocaron crecidas en los afluentes que alimentan el dique Las Pirquitas.
Los vecinos señalaron que el agua sale “marrón”. Algunos advirtieron que la turbidez persiste incluso tras varios minutos de purga, lo que resulta evidente a simple vista. En redes sociales circularon comentarios como que “cada vez que llueve pasa lo mismo”, “primero olor y sabor por las algas, ahora esto” y “no se puede usar el agua para cocinar hasta que se aclare”.
Otros usuarios plantearon que esta situación se volvió recurrente en los últimos meses y expresaron preocupación por la falta de previsibilidad del servicio. Señalaron que “siempre aparece un problema distinto” y mencionaron que recientemente debieron enfrentar gastos para comprar agua mineral cuando se había reportado olor y sabor inusual atribuido a la presencia de algas.
Ingreso de sedimentos
Las lluvias recientes generaron un aumento del caudal que ingresa al dique Las Pirquitas, lo que arrastró material desde las cuencas que lo abastecen.
Aunque el embalse recuperó algo de nivel, continúa muy por debajo del vertedero.
La crecida provocó ingreso de agua cruda con sedimentos hacia la planta potabilizadora, un fenómeno habitual en períodos de precipitaciones intensas y que suele generar turbiedad en la red mientras se estabiliza el proceso de potabilización.
Respuesta oficial
Frente a las nuevas quejas, Aguas de Catamarca difundió un comunicado en el que confirmó que la turbiedad observada por los usuarios está vinculada a las maniobras realizadas tras la reparación de una cañería de 800 mm del acueducto Pirquitas, intervención efectuada el martes a la salida de la planta potabilizadora de Polcos.
La empresa explicó que, luego de estos trabajos y de los movimientos hidráulicos necesarios para restituir el servicio, pueden producirse arrastres de sedimentos que se reflejan como cambios temporales en la apariencia del agua. Indicó además que la situación se potencia cuando existe ingreso de agua cruda con mayor carga de materiales en suspensión, como ocurre después de crecidas.
Aguas de Catamarca aseguró que el agua distribuida mantiene condiciones de potabilidad y que se aplican controles de calidad en todas las etapas del proceso. Ante la presencia de turbiedad en los hogares, reiteró la recomendación de dejar correr el agua durante algunos minutos para favorecer el purgado natural de la red.
La empresa informó que el suministro irá recuperando su condición habitual en el transcurso de las próximas horas y que el sistema continuará siendo monitoreado mientras se normaliza la operación tras las lluvias y los trabajos recientes.
Aumento de gastroenteritis
Semanas atrás, vecinos de Fray Mamerto Esquiú ya habían manifestado su preocupación por el aumento de casos de gastroenteritis, lo que reavivó el reclamo por la calidad del agua potable que llega a los domicilios. Advirtieron que el agua de red presentaba olor desagradable y color anormal. En este sentido, el médico Marcelo Vildoza, quien atiende en la Posta Sanitaria de San Antonio, Fray Mamerto Esquiú, manifestó que en las últimas semanas se observó un incremento de casos de gastroenteritis, tanto en niños como en adultos.