El próximo jueves 7 de agosto vence el plazo para la inscripción de alianzas que competirán en las elecciones nacionales del 26 de octubre. Y, de cara a esa fecha límite, la Casa Rosada tiene definido que no tendrá una estrategia unificada para cada una de las ocho provincias que eligen a los 24 senadores. Una buena elección en esos distritos les permitiría duplicar los jugadores propios en la Cámara Alta.
Hoy el oficialismo solo tiene seis bancas propias en el Senado que preside Victoria Villarruel, a la que consideran «traidora». Eran siete al inicio del mandato, pero expulsaron al formoseño Francisco Paoltroni, por lo que ahora tejen acuerdos distintos según si hay gobernadores aliados, fuerzas provinciales de peso, o donde ya tiene un testeo oficial por elecciones provinciales.
Las 24 bancas que se renuevan se reparten en tres para cada jurisdicción: Ciudad de Buenos Aires, Chaco, Entre Ríos, Neuquén, Río Negro, Salta, Santiago del Estero y Tierra del Fuego.
En territorio porteño las negociaciones están muy complicadas, en especial tras el triunfo libertario de las legislativas locales de mayo, que condenó al PRO al tercer lugar, detrás del peronismo. Más allá de que al agitar el sonajero libertario suenan nombres como el de la ministra de Seguridad Nacional, Patricia Bullrich, lo que más retumba es que de repetir la elección se quedarían con las dos bancas para el Senado, sin necesidad de acordar con el PRO.
El Jefe de Gobierno, Jorge Macri, tendió un puente en una entrevista radial. Ahora quedan nueve días y decide Karina Milei, hermana del Presidente, secretaria general de la Presidencia y armadora nacional de LLA, que no parece entusiasmada con ningún acuerdo con el PRO. En diciembre se le vencen las bancas al radical Martín Lousteau, a la larretista Guadalupe Tagliaferri y al camporista Mariano Recalde.
El peronismo porteño probablemente juegue otra carta camporista. La otra incógnita es saber qué harán las fuerzas que estaban en Juntos por el Cambio y compitieron separadas en mayo: la UCR, Horacio Rodríguez Larreta, la Coalición Cívica de Elisa Carrió.
Por otro lado, Chaco fue el primer experimento de alianza entre un gobernador de Juntos y LLA, algo que se podría volver a sellarse en nueve días con el gobernador radical Leandro Zdero. Y así quedarse con las dos bancas que van para el ganador.
Para la elección de mayo, que ratificó un triunfo sobre el ex gobernador peronista Jorge Capitanich, Zdero y LLA no hablaron de los nombres para octubre y es lo que se discutirá hasta el próximo jueves. El peronismo renueva dos bancas, mientras que el radicalismo tiene la de Víctor Zimmerman, que busca volver a ser candidato.
Una situación similar se podría dar con Rogelio Frigerio, de Entre Ríos. Aunque tiene un movimiento pendular con el Gobierno nacional, y además quedó como uno de los que encabezó los reclamos de fondos a la Rosada, podría haber un acuerdo. Juntos por el Cambio renueva dos bancas en el Senado y el peronismo una, y ya definió a sus candidatos.
Hubo un congreso libertario en Entre Ríos el domingo, liderado por el legislador provincial Roque Fleitas, presidente de LLA en esa provincia, y donde estuvo Joaquín Benegas Lynch, hermano del diputado nacional Bertie, y uno de los posibles candidatos libertarios.
En Salta se da uno de los casos más curiosos. El gobernador peronista Gustavo Sáenz, aliado a la Casa Rosada y con el Partido Justicialista intervenido por Cristina Fernández de Kirchner, podría no participar de la elección nacional. Aún no definió si va con lista propia o no compite.
Hoy el kirchnerismo tiene dos bancas y la restante es del ex gobernador Juan Carlos Romero. En las elecciones provinciales de mayo, el armado del gobernador se impuso en el interior de la provincia y La Libertad Avanza ganó en la capital, que concentra más del 40% del padrón. Ahí se perfila el ex diputado Alfredo Olmedo, mientras que la diputada nacional libertaria María Emilia Orozco, no sería candidata pese al buen posicionamiento, adelantaron a Clarín.
Del otro lado, el peronismo podría ir hasta partido en tres partes. El ex gobernador Juan Manuel Urtubey anunció que será candidato al Senado, y desde hace semanas camina la provincia junto al senador kirchnerista Sergio Napoleón Leavy, aunque por ahora irían en frentes distintos. Intentan armar un frente común pero aseguran que Urtubey se adelantó a auto postularse. El entorno del gobernador lo impulsa a tener lista propia y sería la tercera nómina peronista. La otra opción difundida es que no jugará pero apoyará distintas listas.
A su vez, hasta en Santiago del Estero la Casa Rosada podría colar un senador. Hoy las tres bancas responden al gobernador Gerardo Zamora, dos por el Frente Cívico por Santiago y uno por el Frente de Todos. La provincia elige gobernador con el sistema de lista sábana el mismo día que las legislativas nacionales, y el Partido Justicialista se presentaría por fuera del Frente Cívico para lograr la tercera banca del Senado.
Aunque según una encuesta de CB consultores publicada por Clarín, LLA aparece en el segundo puesto como fuerza. De darse ese escenario (los cargos nacionales se votarán con el debut de la Boleta Única de Papel), podría ganar la banca por la minoría.
El gobernador de Neuquén, Rolando Figueroa, le ganó al Movimiento Popular Neuquino (MPN) después de más de 60 años en el poder y que no participará en las elecciones nacionales. Ahora lanzó «La Neuquinidad» y ya tiene sus candidatos al Senado y a Diputados, con macristas y radicales adentro.
Aunque oficialmente ya no lo integra, el MPN tiene la banca de Lucía Crexell, mientras que por el kirchnerismo se les vence el mandato a Oscar Parrilli y a Silvia Sapag. Figueroa confía en llevarse las dos bancas, pero LLA cuenta con la diputada y pastora Nadia Márquez.
Del otro lado del río Limay, en Río Negro, el gobernador Alberto Weretilneck intentará mantener sus alfiles en el Congreso con el sello provincial Juntos Somos Río Negro (JSRN). El gobernador postuló a su histórico armador en Viedma, el legislador Facundo López, lo que valió el enojo del vicegobernador Pedro Pesatti.
Sus opositores ya confirmaron sus candidatos. La diputada Lorena Villaverde, será la cabeza de lista por los libertarios, mientras que el diputado Martín Soria irá por el kirchnerismo, que renueva dos bancas en la Cámara Alta.
En la otra provincia patagónica que renueva sus tres bancas del Senado, Tierra del Fuego, se da el escenario más atomizado. Se les vence el mandato a la camporista Eugenia Duré, también a la peronista Cristina López y al radical Pablo Blanco.
Ahí Juntos por el Cambio estalló por los aires en 2023, Blanco confirmó que buscará renovar su banca por la UCR, y el PRO quedó diezmado. También hay ruido dentro del peronismo local, entre el sector del gobernador Gustavo Melella y La Cámpora. Y La Libertad Avanza, tiene como referente al legislador Agustín Coto.
Un dato que manejan los detractores de los libertarios es que LLA mantuvo su imagen en las encuestas luego del conflicto por la baja de aranceles a la importación de celulares que impacta en la industria fueguina.