domingo, 27 de abril de 2025 17:00
Mirtha Legrand vivió una nueva noche de mesaza este sábado, pero no pudo ocultar la tristeza que arrastra desde hace días. Con la elegancia que la caracteriza, la Chiqui abrió su programa recordando a una figura que fue muy importante para ella y, en medio del homenaje, reveló un doloroso episodio que la marcó para siempre.
La conductora contó que, hace años, había recibido un gesto inolvidable: una carta manuscrita enviada por el mismísimo Papa Francisco. “A mí me mandó una carta hace unos años, porque era fanático del cine argentino. Y había visto una película que yo hice con mi hermana, ‘Claro de luna’, una carta manuscrita por él”, relató emocionada.
Sin embargo, lo que era un tesoro invaluable, hoy es apenas un recuerdo. Entre lágrimas, Mirtha confesó que perdió la carta luego de sufrir un violento robo en su casa. “Cariñosísima, felicitándome, me decía cosas lindísimas. Yo busqué esa carta ayer, por toda mi casa, y no he podido encontrarla”, lamentó.
La diva explicó que los ladrones se llevaron, entre otras cosas, un objeto de mucho valor sentimental: “A mí hace unos años me robaron en mi casa, entre ello me llevaron mi ataye. Estoy casi convencida que en ese ataye estaba la carta del Papa”, confesó, dejando ver su profunda angustia.
El robo no sólo significó una pérdida material, sino también emocional, dado el valor incalculable que tenía esa carta para ella. “Fue un gesto tan noble, tan emocionante, que todavía lo recuerdo como uno de los momentos más importantes de mi vida”, expresó la conductora.
A pesar de la tristeza, Mirtha destacó que logró conservar una copia del mensaje, lo que le permite revivir, aunque sea en parte, aquel momento tan especial. “Lo guardo con muchísimo amor”, aseguró, mirando con nostalgia hacia el pasado.
Durante el programa, la Chiqui también dedicó sentidas palabras al Papa, cuyo fallecimiento impactó a todo el mundo y, en especial, a su corazón. Conmovida, cerró su homenaje con un deseo: “Que descanse en paz, y que su luz nos siga guiando”. Una noche emotiva, donde Mirtha volvió a demostrar que, aún con el dolor a cuestas, su elegancia y fortaleza siguen intactas.